Durante el presente siglo se ha presentado abundante evidencia científica respecto al bienestar en los seres humanos que generan los cuerpos de aguas de las ciudades, ya sean naturales o artificiales. Así, haciendo una analogía con las áreas verdes, dichos cuerpos que pueden ser lagunas, embalses, ríos, piletas y otras fuentes hídricas, han sido denominados como ‘espacios azules’; registrándose variados reportes sobre sus positivos impactos en la salud mental y en el incentivo a la actividad física de la población que accede a estos bienes.

Sin embargo, en la comuna de Recoleta como en otras de Chile donde se reclama por la calidad y cantidad de los bienes públicos, no existe una caracterización de los tipos de estos ‘espacios azules’ que mejor se ajusten a su propia geografía tanto natural como cultural de tal manera que ante las omnipresentes restricciones presupuestarias, ellos contribuyan a elevar el bienestar de los vecinos.

Este es el fondo del trabajo que está desarrollando Lucio Cañete Arratia, académico jornada completa de la Universidad de Santiago de Chile, junto a otros profesionales de la misma casa de estudios, y que realizará el 31 de marzo una reunión de trabajo con las vecinas y los vecinos de Recoleta, y “que así sean participes de esta investigación que estamos desarrollando a través de la dirección de investigación de la Universidad Abierta de Recoleta”.

Explica Cañete que esta iniciativa “pretende contribuir a elevar vuestro bienestar a través del diseño, para que posteriormente se materialicen, de cuerpos de aguas tales como piletas, fuentes y pequeñas lagunas de uso público dentro de la comuna”. Añade el investigador que “la presencia de estos cuerpos de agua generan diversos impactos tales como la amortiguación de las olas de calor en los veranos, la protección de especies, la disminución del estrés y el incentivo a la actividad física entre otros. Además, está demostrado que los inmuebles cercanos a dichos ‘espacios azules’ tienen un valor comercial superior”.

En relación a la invitación a las vecinas y los vecinos Cañete indica que “para que el proyecto tenga éxito, se requiere de la opinión de ellas y ellos que en definitiva serán las beneficiarias y los beneficiarios de estos bienes públicos. Nuestra idea es poder fijar una reunión en el mes de marzo y poder exponerles el proyecto en detalle y así recibir de parte de ellas y ellos los siempre interesantes comentarios de la comunidad”.

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