El país ha hablado fuerte y claro: es necesario y urgente avanzar hacia un modelo de desarrollo que abandone la hegemonía del mercado y la reemplace por la hegemonía de la dignidad humana. En este marco, esperamos que la próxima nueva Carta Fundamental incluya sin ambages el derecho a la educación como una obligación que el Estado debe garantizar.
La Universidad Abierta de Recoleta (UAR) es la expresión viva y creciente de que esa meta es posible y que es de la mayor justicia para el desarrollo humano toda acción que propenda a democratizar el acceso al saber y a la construcción de este.
Así, la UAR ha fundado el propósito de su acción docente en las personas que participan en nuestros cursos y talleres, todos absolutamente gratuitos; personas que, en un número superior a cincuenta mil durante estos casi tres años, han acogido la invitación para construir saberes y, mediante ellos, ser agentes de cambio.
Esto, sin embargo, sería impracticable sin esa pléyade de casi novecientos profesionales, expertas y expertos, de distintos géneros, jóvenes, adultos y personas mayores, que en la UAR han ejercido su derecho a educar. A educar para la libertad, para la transformación, para la emancipación. Son las y los docentes de la UAR quienes nos dan cotidianamente una verdadera lección de vida en estos tiempos donde las lógicas neoliberales parecen fagocitarlo todo en aras del tener y no del ser. En efecto, ellas y ellos realizan su docencia en la UAR de manera totalmente voluntaria y con un alto nivel académico y de dedicación que reconoce la unanimidad de las y los estudiantes que han sido parte de los programas académicos de la UAR.
Para cada uno y cada una de ustedes, docentes de la UAR, en este Día del profesor y la profesora, va nuestro más cariñoso abrazo, saludo y afecto por esa labor, por esa conciencia y por esa voluntad que la institución y sus estudiantes reconocemos y valoramos.
Porque, muy probablemente, lo fundamental que ustedes nos enseñan en cada acción docente es que la educación, como sustento del presente y futuro, también se trata de abrir espacios para ejercer el derecho a educar.
Con ustedes, seguimos en la lucha por un nuevo Chile.
Prof. Dr. Christian Reyes G.
Director Académico
Universidad Abierta de Recoleta